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A veces, debido al deterioro dental o lesiones traumáticas, un niño puede perder un diente de leche temprano, antes que el permanente que se encuentra debajo esté listo para salir a su posición. Cuando esto ocurre, el dentista considerará la mejor manera de guardar el espacio que dejó el diente de leche para mantener un camino despejado para el sucesivo diente permanente. Aunque no en todas las situaciones donde se pierde un diente de leche temprano necesita una intervención para mantener el espacio, muchas veces un aparato dental pequeño conocido como un mantenedor de espacio es necesario para asegurar que el diente permanente no este fuera del arco dental o impactado por dientes adyacentes que estén en movimiento.
Mantenedores de espacio son aparatos fijos o removibles que son diseñados a mantener la integridad del espacio que dejó el diente perdido. Sencillos y cómodos de tener, la clase y el diseño del mantenedor de espacio de su hijo/a será determinado por nuestro dentista. Cuando el diente permanente comience a salir, un mantenedor de espacio ya no es necesario.
